Un muy interesante artículo se publicó en la revista Newsweek (Reporte Especial 2 de julio 2009, leerlo aquí). Trata sobre cómo toda persona, independientemente de la generación a la que pertenezcamos, "baby boomer", "generación x" o "generación y", etcétera, tenemos la experiencia compartida de que en algún punto, tendremos padres que envejecen y necesitan ayuda e hijos que también la requieren.

Millones de personas se encuentran en medio de una situación en la que están criando a sus hijos y al mismo tiempo le dan "una manita financiera" a sus padres que envejecen rápidamente.

Algunos tips que el autor nos da incluyen:

Da un paso atrás. Desde ésa perspectiva analiza la situación. Todos queremos honrar a nuestros padres, pero también hay que estar cómodos con las decisiones que ellos hicieron - y con las que hacemos hoy para nosotros mismos -si no guardaron para su retiro, no deberían esperar que tu los saques del problema. Mis padres tuvieron su oportunidad de ejercer sus decisiones en su momento. No hay que instalarse en el modo de víctima-rescatador.

¿Dónde envejecer? La sociedad siente que todos deberían envejecer en su lugar; que nadie debería entrar a una de esas instalaciones con cuidado y asistencia para ancianos. El "asilo" puede ser la última opción, pero en muchas ocasiones es la mejor opción para recibir cuidados y atención para una persona. Alguien que pierde memoria por ejemplo, requiere cuidados especiales, quién prepare sus alimentos, le dé documentos y otras muchas pequeñas actividades que se van haciendo cada vez más cruciales. No hay que proyectarse con ellos. No estás poniendo a un hijo de 50 años en el asilo.

Muchas veces lo que resulta, es que cuando están en casa, terminan aislados socialmente.

Como mantener la paz entre los demás miembros de la familia. Hay que pensar en lo que funciona y lo que no funciona y no en lo que es bueno y lo que no lo es. El lenguaje cuenta mucho.

No cometas el error de excluir a tus padres del proceso de decisión. Ellos debieran y pueden tomar sus decisiones. Recuerda que se trata de su bienestar y los asistimos para que puedan satisfacer sus necesidades y deseos.

Hay ocasiones en los que un hermano (a) es el que se involucra en mayor grado con el cuidado del ancianito, rescatándolo de su situación. Especialmente cuando los hijos están separados geográficamente. Por otro lado, los padres no tratan igual a sus hijos, siempre hay cierta preferencia.

Un consultor geriátrico puede ayudar a diluir un poco la presión que se genera en esos casos.

Opciones para la gente que tiene que echar mano de los ahorros de su propio retiro para pagar colegiaturas y cuidados para ancianos a mismo tiempo.

Piensa en "recursos" en el sentido más amplio posible. Busca que servicios hay disponibles para los individuos a los que quieres ayudar. Para algunas personas, obtener ayuda en planeación financiera puede ser el paso apropiado, para otros no. El reto es hacer la decisión que sea de acuerdo a tus valores propios y no los de alguien más. Si los recursos son limitados, tus padres y tus niños debieran poder comprenderlo y ser de mucho más apoyo.

Mis opciones personales.

Quizá la más complicada y al mismo tiempo más fácil. Mientras estoy generando ingresos, debo prever que el mismo ingreso se encargue de mis necesidades actuales y futuras.

Si ahorro cuando menos un diez por ciento de mis ingresos actuales, tendré los huevos en mi canasta para enfrentar lo que venga.

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